L’HÉRITAGE SPORTIF
Rindiendo homenaje a los orígenes de nuestro nombre, Rapha se enorgullece de asociarse con St Raphaël en una colección de edición especial que celebra nuestros lazos colectivos con el mejor deporte del mundo.
26 June 2023
Los patrocinadores del ciclismo son icónicos. Inextricablemente ligados a sus respectivos equipos, sus nombres han acompañado algunos de los mejores momentos de este deporte, inmortalizados junto a los ciclistas que llevan sus logotipos. Y desde la lechada de los azulejos hasta los televisores, los maillots del pelotón profesional lo han visto todo. Pero en los mejores tiempos de las décadas de 1950 y 1960, fue un improbable patrocinador extradeportivo (ajeno a la industria de la bici) el que inspiraría algo más que victorias en el mayor escenario del ciclismo.
LE GRAND FUSIL
El aperitivo a base de quinina, St Raphaël, fue uno de los famosos patrocinadores del ciclismo de posguerra. Inventado en París en 1830, este elixir de color ámbar dio su nombre a un equipo en el que figuraba, de forma bastante acertada, un tal Raphaël Géminiani. Conocido cariñosamente como Le Grand Fusil (La Gran Pistola), Géminiani pasó a dirigir el equipo, accediendo a ciclistas como Rudi Altig, Roger Rivière y Tom Simpson. Sin embargo, de todos los talentos que trajo Géminiani, ninguno parece captar tan bien el espíritu de la época como Anquetil, que se incorporó en 1962 y fue fundamental para el éxito del equipo.